20 de diciembre del 2001 - 20 de diciembre del 2023
Milei no es De la Rua. El actual presidente es producto de una coyuntura internacional y nacional muy distinta, de una época de decadencia del dominio de EUA y del sistema imperialista mundial y de una crisis de representación política burguesa muy más profunda que la del año uno del siglo XXI.
Millei y De la
Rua llegaron de la mano de coaliciones políticas que a nivel electoral tuvieron
un fuerte apoyo de la clase media. En los dos casos forman parte de gobiernos
anti-peronistas después de los gobiernos de la dictadura militar (1976-1983).
Ambos son
producto de la crisis de la economía política argentina y de la insatisfacción
popular con el peronismo históricamente gobernante. Aprovechándose del voto
bronca los gobiernos antiperonistas lanzan ajustes antipopulares en nombre de
la salvación económica, y a excepción de Macri, del cual trataremos más
adelante, todos los gobiernos antiperonistas de los últimos 40 años fueron
derribados por la ira popular.
La cólera de las
masas contra los ataques a ellas impulsados por De La Rúa, como la
flexibilización laboral, con la llamada ley BANELCO y la confiscación de los
ahorristas con el corralito, derribaran al presidente de la UCR dos años
después de su pose.
El levantamiento
popular del 19 y 20 de diciembre del 2001 puso fin a su gobierno y abrió camino
a una situación pre-revolucionaria.
Con Milei, por
tras de la “revolución por la libertad” y de la “libertad carajo!” viene
amenazas de prisión e criminalización de toda protesta popular en contra los ya
anunciados corte de obras y servicios sociales que comprometerá las mínimas condiciones
de sobrevivencia de los sectores más empobrecidos del proletariado, devaluación,
tarifazo y impuestazo para todos los asalariados incluso para las clases
medias.
Hoy los ataques
de De La Rúa, se empequeñecen frente a los que hace Milei con la
mega-devaluación que licua los salarios o los tarifazos próximos a venir todo
esto hará que Milei se desgaste más rápido de lo que en su momento se desgató
De La Rua.
Y más! Milei es muy
más débil que De La Rúa, no tiene un partido tradicional como UCR, o un bloque
parlamentario propio de relevancia, es rehén del bloque del odiado Macri, quien
hizo un de los acuerdos de mayor endeudamiento de Argentina con el FMI de todos
los tiempos, no cuenta con apoyos fuertes a nivel internacional - como se ve en
que no pudieron hasta ahora conseguir financiamiento externo, lo que hace que
no haya gradualismo posible en el ajuste - y no posee vínculos importantes con
las organizaciones sindicales. Por eso, en pocos días Millei ya fue obligado a
desmoralizarse y renunciar a sus propias promesas de campaña radicales como la
dolarización, el fin del Banco Central, romper relaciones con China y Brasil.
La realidad viene obligando al aspirante a facho a recular todos los días.
En las protestas
del 20 de diciembre, a los que se espera que concurran decenas de miles de
personas que luchan por una navidad sin el hambre que les impone Milei, van a
obligar al gobierno hacer más un paso atrás, en su recién anunciado protocolo
represivo.
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