Repudio al ataque nazi a CFK
En televisión nacional, el presidente
argentino Alberto Fernández declaró:
Este es el hecho más grave que ha ocurrido desde que restablecimos la democracia en 1983. Cristina sigue viva porque, por una razón que no ha sido técnicamente comprobada, el arma que contenía cinco balas no disparó, a pesar de que estaba apretando el gatillo. NACIONAL CADENA -Mensaje del Presidente de la Nación, Alberto Fernández
El criminal es Fernando André Sabag
Montiel, un hombre de 35 años vinculado a organizaciones nazis que operan en
Argentina y que tiene tatuajes con simbología nazi. Montiel ha publicado en
contra de los inmigrantes bolivianos y recientemente apareció en televisión
haciendo declaraciones en contra de los beneficios sociales para los pobres.
Debido a que no logró su objetivo gracias a su propio fracaso, a su amateurismo, el criminal parece haber actuado individualmente, sin embargo, no cabe duda de que representa a la extrema derecha terrorista de un frente reaccionario que lo instigó y animó a actuar, como parte de la campaña de la oposición de derecha que en este momento está presentando una demanda legal contra CFK. Ciertamente, Montiel creía que tenía que tomar la “justicia” por sus propias manos para evitar que CFK no fuera castigada.
Otro fascista, que se presentó como el
mejor amigo del criminal, incluso declaró en televisión por Telefé :
A pesar de que políticos de varios países
se solidarizaron con CFK y muchos políticos argentinos también de la principal
coalición opositora del derechista argentino Juntos (UCR + PRO). PatriciaBurlich, exministra de Seguridad en el gobierno de Macri, actual presidenta del
PRO, candidata a ser una especie de Bolsonaro argentino, no repudió el ataque y
bloqueó un pronunciamiento conjunto de su coalición al respecto.
EL sector del moyanismo (frente sindical) dentro de la Confederación General delTrabajo contemplo un paro nacional para el 5 de septiembre, con movilización hacia la sede de la Corte Suprema de Justicia contra el lawfare, tras el fallido atentado contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Esta movilización convocada por la burocracia sindical es progresiva porque entra en contradicción con la derecha y al golpismo judicial, instrumento de la propia derecha. A pesar de que un sector de la burocracia de la CGT apoya al superministro de Economía, Sérgio Massa, responsable de los acuerdos con el FMI, por sus propias contradicciones, si se produce el paro podría generar protestas de los sectores de base de la organizaciones sindicales (a nivel de comisiones internas, delegados, y los trabajadores de base de los sindicatos) también contra los acuerdos del gobierno de Fernández con el FMI.
Este ataque contra CFK se da en un contexto en un contexto de creciente violencia de las oposiciones de derecha contra todo lo que no esté en consonancia con su orientación ultrarreaccionaria, opción que tiene sus principales expresiones hoy en “Juntos” y los “Libertarios” (anarcocapitalistas) cada vez más neo -fascistas, como evolución de los neoliberales. El ataque fue contra CFK, por ser identificado por criminal y de extrema derecha como representante político de las políticas sociales y los pocos derechos que tienen los trabajadores imigrantes. El resentimiento nazi se vuelve contra los sectores más precarios de la clase obrera. La vanguardia militante debe tomar nota de este ataque contra CFK como parte de una campaña de creciente violencia contra el proletariado.
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